Ruedas de negocios durante BOmm 2022 compuestas por 263 artistas nacionales, 110 agentes y 234 compradores
La Cámara de Comercio de Bogotá promueve el crecimiento y formación profesional de la industria musical a través del programa BOmm, explorando temáticas claves que configuran la fabricación de producciones sonoras, así como abrir espacios para potenciar el impacto de los artistas en medios tradicionales y digitales.
Con más de 1025 ritmos folclóricos, Colombia es conocida como «el país de los mil ritmos», que van desde el bambuco y el vallenato, hasta el bullerengue y la cumbia. Por otro lado, la música colombiana no solo se nutre de sus raíces tradicionales, sino que también se abre a otras corrientes musicales del mundo, como el rock, el pop, el rap, el reggae y el jazz. Así, la industria en el país se ha convertido en una de las más ricas y dinámicas de la región.
De acuerdo con un informe de Statista, se proyecta para el mercado musical en Colombia que los ingresos totales alcancen los US$27.97 millones para el año 2027 mostrando una tasa de crecimiento anual del 12.17%. El informe destaca, además, que los ingresos por compras dentro de las aplicaciones (IAP) se proyectaron en 3.53 millones de dólares en 2022.
En la última década, la industria musical colombiana ha experimentado un crecimiento exponencial y se ha posicionado como una de las más vibrantes de América Latina. De esta manera, el país ha sido reconocido internacionalmente por la calidad y diversidad de sus artistas, quienes han logrado traspasar fronteras y conquistar los oídos de audiencias globales con géneros como reggaetón, música urbana, vallenato y folclor.
Ser un profesional de la música en Colombia implica enfrentar una serie de retos y desafíos, especialmente para los artistas independientes que buscan abrirse paso en un mercado competitivo y cambiante. Así, el Bogotá Music Market busca proveer herramientas que faciliten los contactos para negocios y fortalecimiento de las propuestas artísticas.
Para los artistas colombianos que buscan expandir su alcance y fortalecer su posición en la industria musical, la colaboración entre artistas nacionales e internacionales ha generado fusiones únicas y permite llegar a audiencias diversas.
Colombia se destaca por su propuesta musical enfocada en las regiones y sus costumbres, que conecta los sonidos de los instrumentos con las diversas culturas y de la mano con los agentes o empresas, agregan valor a lo largo de la cadena de la industria.
La Iniciativa Cluster de Música que lidera la Cámara de Comercio de Bogotá (CCB), publicó que durante el período comprendido entre 2020 y 2021, se registró un notable incremento del 6,4% en el número total de empresas activas, contabilizando 1.588 negocios.
Esto ha llevado a las empresas locales a convertirse en potencias del sector, centrándose en gran medida en el ámbito digital. En un contexto en el que el 67% de los ingresos de la industria musical a nivel mundial provienen del streaming, la adopción de enfoques tecnológicos se vuelve fundamental.
Una reflexión de la Universidad Central, afirma que «la interconexión y descentralización de la información ha permitido un mayor y mejor acceso a toda una diversidad musical», lo que hace que la construcción de una marca personal sólida se haya vuelto esencial para los artistas en la industria de la música.
Es así como la autenticidad, coherencia en la imagen o el mensaje que transmiten los artistas en las plataformas digitales son clave para conectar con el público y destacarse en un mercado cada vez más competitivo. Para los músicos colombianos, aprovechar plataformas como YouTube, Instagram y Spotify para mostrar su talento, interactuar con sus seguidores y potenciar su presencia en el panorama musical hace parte de las estrategias que tienen dentro de la industria.
También la era digital ha presentado nuevos desafíos, como el manejo de la privacidad y la gestión de la reputación en línea. Es esencial para los artistas entender el poder de las redes sociales y utilizarlas de manera estratégica para potenciar su carrera.